21 agosto, 2009

Lapsus - Canción tercera

Apuntalando sombras contra
la pared desnuda
del silencio irredimible.
Las horas anchas como
mil noches
cada
una, sin
compañía ni secretos
que descubrir.

La herida
podrida, profunda,
que nadie ve
salvo
la soledad escupida de
los tejados.

Fueron
las ruinas que dejé
detras. Tan
poco miedo al fuego,
tanto miedo a
las cenizas...

No hay comentarios:

Publicar un comentario